lunes, 29 de agosto de 2011

BARCELONA ES BONA...SIEMPRE







La gran generosidad de unos excelentes amigos han llevado a su bella acompañante y a este servidor de ustedes a la siempre interesante ciudad de Barcelona.

Nuestros primeros pasos se dirigieron al templo de La Sagrada Familia, esa magnífica sinfonía de belleza, simbolismo y trascendencia atribuida a la mente y la voluntad del inclasificable Antoni Gaudí.

Barcelona ofrece múltiples atractivos de todo tipo. En el ámbito cultural, no es el menor el seguimiento de su Modernismo. http://es.wikipedia.org/wiki/Modernismo_catal%C3%A1n . El mero deambular por el Paseo de Gracia o la Avenida Diagonal nos permite conocer y comenzar a querer a Domenech y Montaner, Puig y Cadafalch o Gaudí, entre otros quizás menos populares pero no por ello menos consistentes artísticamente.

Del primero, mi preferido, que en el ámbito de los sentimientos no tienen entrada ni la objetividad ni la razón, me refería muy brevemente hace un tiempo, a propósito de otras reflexiones. http://libreoyente.blogspot.com/2011/03/que-vuelvan-los-eclecticos.html

No obstante, preferencias personales aparte, he de admitir que Antoní Gaudí, a la indudable belleza de sus creaciones une esa potencia mental, simbólica y artística que le hace romper todos los apartados esquematizadores y lo coloca en ese epígrafe genial de los inclasificables. ¿Será por eso que mi mente establecer una extraña relación con otro de mis "barceloneses" preferidos, Pablo Picasso?.



Mas vayamos a la obra, ...que por eso los conoceréis... Decía en párrafo anterior que es atribuida a Antoni Gaudí, porque si bien es cierto que quizás él es su principal motor y "cabeza de cartel", una de las principales ideas que la obra encierra, el impulso de la iniciativa privada, no sería posible sin el concierto de otro gran número de personas, pues en todos los ordenes de la vida las empresas funcionan si hay el empeño de alguien que tira de ellas, pero siempre es necesaria la concurrencia de un equipo de colaboradores sin los que la idea del protagonista quedaría en una buena intención.

Así debemos reconocer y rendir homenaje a D. Josep María Bocabella, http://www.sagradafamilia.cat/sf-cast/docs_instit/glossari/gl_assoc.php , librero que funda la Asociación Espiritual de Devotos de San José, la cual promueve la construcción de templo y con donativos estrictamente privados compra la parcela de terreno necesario.

También es justo señalar que el primer arquitecto de la obra fue el murciano D. Francisco de Paula del Villar y Lozano, que proyectó un templo neogótico, pero que lo abandonó un año después por desavenencia con otro arquitecto asesor del Sr. Bocabella.

Fue entonces (1883) cuando Gaudí, que había asistido a la ceremonia de colocación de la primera piedra precisamente en virtud de haber sido ayudante del Sr. Villar, se hace cargo del proyecto, modificando totalmente la intención estilística, pero respetando lo ya construido, lo que dice mucho en favor de su personalidad.







Desde esa fecha hasta su absurda muerte en 1926 Gaudí trabaja de modo incalificable en esta magna obra, incluso desde 1914 lo hace de forma exclusiva.

Como decíamos más arriba, tenía un numeroso grupo de colaboradores, entre los que por citar algunos nombres, la página oficial www.sagradafamilia.cat menciona a Berenguer, Rubió, Sugrañes, Jujol, Canaleta, Quinta Vidal, Ráfols, Martinell, Puig Boada, Bonet Garí, Folguera, Bergós, como arquitectos, Ricard Opios como dibujante, Llorenç Matamala, Carles Maní y Pau Badía como escultores, Agustí Massip Brassó como constructor, Oñós como cerrajero, Pujol i Bausis como ceramista, Jaume Munné como carpintero y los hermanos Baudía como forjadores.






El resto de la historia, si bien muy interesante, es también prolija y detallada, pueden encontrarla en la página referenciada de La Sagrada Familia, así que les ahorro el "corta y pega" y les invito a su propia aventura de navegación. Solo me queda rendir homenaje de admiración y agradecimiento a, entre otros muchos Josep María Sibirachs, Joan Vila-Grau y Etsuro Sotoo como cabezas visibles de un amplísimo equipo de colaboradores, artesanos, operarios, etc., e invitarles de todo corazón a vivir esta experiencia singular, incluida también la visita a las denominadas Escuelas Provisionales.


Uno se siente transportado a todos los siglos, en comunicación con la historia y la mente, y aunque formalmente se podría alegar que no hay coincidencias, recuerda a aquel excelso humanista, Juan de Herrera, capaz de construir en el s. XVI aquel compendio del saber que fue El Escorial, en el que resumía su pensamiento de la arquitectura como arte, como ciencia de la excelencia, que imponía unas formas a la materia dando "orden al caos", haciendo que la fría piedra deje de serlo cuando se talla y que sea capaz de contener razón, pensamiento, fuerza y orden.

Las formas son, evidentemente, muy diversas, pero es común la voluntad del ser humano al servicio de un espíritu que ansía trascender.








martes, 9 de agosto de 2011

¡ATENCIÓN: PREGUNTA!

Hoy un buen amigo me decía que parezco muy "sesentaiochesco", y tiene mucha razón. De esa época soy.


Se acercan las elecciones, y el drama es a quien votar. Está claro que la opción PP$OE está agotada. 


Me pregunto: ¿Para cuando las listas abiertas y la participación real?. Para cuando la abolición del Senado y otros tantos organismos y cargos inútiles y duplicados, para ahorrar gastos?. ¿Para cuando un programa será un contrato social?. ¿Para cuando los sueldos de los representantes acordes a sus ingresos anteriores en la vida activa (y eso si la tenían). ¿Para cuando los mandatos limitados?. 


¿Será que soy muy utópico?. Pues este es mi programa electoral, y no pienso renunciar.